domingo, octubre 25, 2009

Descubrimientos: Misery, de Stephen King


Misery es un relato obsesivo que sólo podía escribir Stephen King. Un escritor sufre un grave accidente y recobra el conocimiento en una apartada casa en la que vive una misteriosa mujer, corpulenta y de extraño carácter. Se trata de una antigua enfermera, involucrada en varias muertes misteriosas ocurridas en diversos hospitales. Esta mujer es capaz de los mayores horrores, y el escritor, con las piernas rotas y entre terribles dolores, tiene que luchar por su vida.

Leyendo varias opiniones, he visto que este es uno de los mejores libros de King, así que veo que empecé a lo grande con este escritor.
Misery es de esos libros impactantes, que te hacen vivir la historia con sus personajes. Hay varios pasajes que se te quedan grabados a fuego. Es una novela de gran carga psicológica. El ambiente que se respira es asfixiante, nunca hubiera leído a un autor que supiera recrear de forma tan perfecta un escenario de angustía, terror y tensión.

Otro de los méritos del autor es la fantástica caracterización de los dos personajes principales: Anne Wilkes y Paul Sheldom. Ambos personajes están tan caracterizados psicológiamente, que te haces una perfecta idea de ellos. Nunca me había encontrado con un personaje tan inquietante y espeluznante como Anne, es uno de los que más me han impactado.
Me gusto también el hecho de que Paul fuera escritor y fuera contando a lo largo del relato sus impresiones de la escritura y de la creación de su novela. Me pareció muy interesante el proceso de creación de su novela.
A veces el estilo del autor parecía frívolo y morboso, lo que no me gustaba. Me parecía innecesario cuando describía escenas de forma tan sangrienta y morbosa, en lugar de centrarse más en la situación en sí, en el significado emocional.

En general, lo veo recomendable para cualquier lector.Es una historia adictiva, se lee rápido. Es una buena opción para adentrarse en la novela de terror.

***
“-¡Yo no quiero su espíritu!-gritó torciendo los dedos como garras y sacudiéndoselas en la cara como si quisiera arrancársela de los ojos. ¡Yo la quiero a ella! ¡Usted la asesinó!
-¡Yo no la maté!
-¡Claro que no!-dijo con sarcasmo amargo-. Y si usted no fue Paul Sheldon ¿quién entonces?
-Nadie -contestó con suavidad-. Simplemente murió.”

“Annie Wilkes era la perfecta espectadora, una mujer que adoraba las historias sin que le importara el mecanismo de su construcción. Era la encarnación de aquel arquetipo Victorino: EL Lector Comandante. No quería saber nada de sus concordancias y de sus índices porque Misery y los personajes que la rodeaban eran, para ella, perfectamente reales.”

“Ese otro proceso, tratar de tener una idea no era en modo alguno tan elevado ni exaltante, pero sí era igual de misterioso e… igual de necesario. Porque cuando uno escribía una novela, casi siempre se atascaba en alguna parte y no tenía sentido esforzarce por continuar hasta que surgiese una idea.
Cuando necesitaba una idea, su procedimiento habitual era ponerse un abrigo y salir a dar un paseo. Si no la necesitaba, se llevaba un libro. Reconocía que el paseo en sí mismo un buen ejercicio, pero era aburrido. El libro era imprescindible si no tenía a nadie con quien hablar mientras caminaba. Pero si lo que necesitaba por encima de todo era una idea, el tedio podría tener en una novela empezada el mismo efecto que la quimioterapia en un paciente de cáncer.”

1 comentario:

César dijo...

Tienes toda la razón del mundo. Es el mejor libro para empezar con King.
Yo he leído 5 de él, sobre todo de la primera etapa, y este es el mejor, sin duda

Saludos